16 DE MAYO DE 2024
NOTICIAS INTERNACIONALES
Los testigos de Jehová de América del Norte predican el mensaje de la Biblia durante un eclipse solar
El 8 de abril de 2024, pudo verse un eclipse solar total en algunas partes de América del Norte. Millones de personas acudieron a contemplar este fenómeno natural. Muchas de ellas tuvieron que viajar largas distancias. En las ciudades donde podría verse el eclipse, se organizó una campaña especial de predicación, en la que participaron testigos de Jehová de Canadá, Estados Unidos y México. Se pusieron carritos con publicaciones bíblicas en unos 15 idiomas en más de 24 ciudades.
En la ciudad de Carbondale (Illinois, Estados Unidos), dos universitarios se acercaron a uno de nuestros carritos. Una hermana empezó a hablar con ellos usando la pregunta “¿Cómo empezó la vida?” que se veía en el cartel del carrito. Entonces, uno de los jóvenes le preguntó: “Si Dios existe y nos ama, ¿por qué permite el sufrimiento?”. La hermana le mostró cómo usar el sitio jw.org para encontrar la respuesta. A los estudiantes les impresionó especialmente cómo respondía esta pregunta uno de nuestros videos, y dijeron que querían aprender más y hablar con sus amigos de lo que habían aprendido.
En la localidad de Sherbrooke (Quebec, Canadá), un joven de habla punyabí se quedó impresionado cuando una hermana que estaba en un carrito lo saludó en su idioma. Este sencillo detalle llevó a una buena conversación, y la hermana pudo mostrarle cómo son nuestros cursos de la Biblia usando el folleto Disfrute de la vida. Al joven le sorprendió saber que podía recibir clases particulares de la Biblia a la hora y en el lugar que él quisiera, o hasta por videoconferencia. La hermana hizo planes para que un hermano estudiara la Biblia con él.
Una hermana que estaba junto a un carrito de publicaciones en la ciudad de Evansville (Indiana, Estados Unidos) empezó a hablar con una mujer que se había mudado a la ciudad para cuidar a su mamá enferma. La hermana le contó que ella también había cuidado a su propia madre y que entendía lo difícil que puede llegar a ser. Entonces le leyó las palabras tan animadoras que se encuentran en Isaías 33:24 y Apocalipsis 21:4. Estas promesas de la Biblia conmovieron tanto a la señora que le pidió a la hermana que se las leyera de nuevo. Tuvieron una linda conversación y quedaron en seguir hablando de la Biblia otro día.
Nos alegra mucho que nuestros hermanos de América del Norte hayan aprovechado este suceso tan especial para hablar con otros de nuestro “Gran Creador” y de sus maravillosas promesas (Eclesiastés 12:1, 2).